Con dos goles en la primera etapa, el combinado violeta goleó al antiguamente poderoso Inter de Milan. El primer gol lo hizo Babacar (6') en una jugada sorpresiva. El jugador conducía el balón ante la última linea defensiva de la visita. Solo necesitó de un espacio cedido por un defensor para meter un zapatazo al segundo palo desde afuera de área, el portero nada tuvo que hacer. El tiro fue esquinado, un verdadero golazo.
Los visitantes trataron de despertar de su letargo. Habían perdido 4-1 en su último partido de liga. Necesitaban un triunfo urgente, ya luchaban cuesta arriba y las cosas se le pusieron más difíciles. El rápido colombiano Juan Cuadrado(que venía de una lesión a la rodilla) se encargó de quitarle las esperanzas a los capitalinos. Juan anotó desde afuera del área también. Apiló a dos rivales haciendo la diagonal y sacó un remate desde la izquierda hasta el segundo palo poniendo el 2-0 con el que los jugadores se fueron al entretiempo.
El Milan de Walter Mazzarri venía de perder su invicto de 16 partidos sin conocer la derrota. Cagliari se encargó de iniciar su declive. Fiorentina y Nenad Tomovic los crucificaron. Nenad puso el tercero ante las facilidades, esta vez dentro del área visitante.
Antes del tercer gol, Babacar tuvo una chance clarísima desde unos 25 metros. El tiro pasó apenas desvido. La defensa del Inter lucía impresentable. Cualquier jugador pasaba como Pedro en su casa y una arremetida de los 'violas' a partir de los tres cuartos de cancha hacía temblar hasta al propio Walter Mazzarri. O los delanteros de la 'Fiore' eran muy buenos o los defensores del Inter muy malos y entreguistas. Todos crucifican al meta Tomovic sin fijarse que la defensa lucía pálida desde un partido antes. Sí, ese en el que cayeron humillados ante Cagliari. Será el inicio de una crisis, o es solo un altibajo. Eso se verá con el pasar de los partidos.
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